Sobre Exploración.

Explora con cuidado los alrededores de tu Base. Tienes que encontrar tus minas de oro y piedra, la Caza Cercana, y la Pesca Costera que esté al alcance, antes de ir a buscar a tu oponente.

Según el tipo de mapa, localiza los puntos por los que puede venir tu oponente, y los más adecuados para cerrarlos, si es posible. Si hay vados, ciérralos por el lado de tu contrario; si intenta pasar por ahí, tendrás tiempo de construir otro muro en tu orilla.

Cuando tu economía está ya funcionando, y tu Explorador encuentra ovejas en territorio contrario, no las mandes directamente a tu base, úsalas para explorar también, será como si tuvieras varios exploradores.

Cuando explores la Base de tu oponente, localiza siempre la mina de oro y el aserradero, es allí donde tendrás que golpear primero, pero no te acerques al Centro Urbano. En cambio, pasa por el molino; si tu oponente ha llevado ovejas hasta allí, mátalas. Si no está atento, podrás hacerlo sin que se dé cuenta, porque no sonará ningún aviso.

Cuando hayas explorado la Base de tu oponente, molesta un poco a los Aldeanos que no estén cerca del Centro Urbano, y siempre que tengas una vía fácil de escape. Y recuerda, no luches con ellos, solo se trata de hacerles perder un poco de tiempo, tu explorador es muy valioso, al principio de la partida.
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Sobre Construcción.

Al principio, construye tus Casas cerca, para que tus Aldeanos no tengan que perder tiempo desplazándose, pero deja espacio suficiente alrededor del Centro Urbano y el molino, para construir luego las granjas.

Para construir el Aserradero, elige el bosque más cercano a la Mina de Oro que vayas a explotar primero. Así, cuando construyas la mina, tu producción de madera y oro estará concentrada en la misma zona, que podrás proteger y defender más fácilmente.

Construye tus Granjas lo más ordenadamente posible alrededor del Centro Urbano. Procura que no queden espacios entre ellas, no es cuestión de estética, sino de eficiencia: cabrán más, y los Aldeanos tendrán que andar menos.

Al principio de la partida, construye Granjas solo alrededor de tu Centro Urbano; los Aldeanos que trabajen allí estarán protegidos, y podrán Guarecerse rápidamente; los que lo hicieran alrededor del molino, no.

Si has hecho empalizadas al principio de la partida, y quieres reforzarlas más tarde, puedes construir una hilera de Casas justo detrás. Las Casas son necesarias, sólidas, y baratas. Además, solo cuestan madera, de modo que ahorrarás piedra, que es escasa. Solo tendrás que rellenar los huecos que queden.

 
Sobre los puntos de Reunión.

Los Puntos de Reunión de los edificios son útiles para muchas cosas.

Sitúa el de los Centros Urbanos en un recurso, oro, madera o piedra, solo tienes que pulsar h ccc, los Aldeanos se pondrán a trabajar directamente en cuanto salgan.

Puedes insertar edificios militares en tus muros, o hacer muros únicamente con esos edificios. Según donde pongas el Punto de Reunión, tus tropas saldrán dentro de tu Base, o fuera, lo que más te convenga.

Si tu ejercito se está desplazando por un mapa gigantesco, dejando atrás tus edificios militares, agrupa los más cercanos (o los que más te convengan), asígnales un número (para encontrarlos y crear rápidamente desde esos, y no otros) y cuando los tengas seleccionados, sitúa el Punto de Reunión un primera línea (o donde te convenga), todas las unidades que crees, irán directamente allí. Esto te evitará tener que desplazar la vista para buscar los refuerzos y mandarlos "a mano" al combate. Esto es especialmente útil en esos intrincados y gigantescos mapas de Islas, donde tienes múltiples Puertos creando Galeones por todo el mapa.

Sitúa el Punto de Reunión de tu Mercado en el de tu Aliado; cuando crees Carretas de Mercancías, irán directamente a ese Mercado.

Cuando crees unidades caras y frágiles, como las Unidades de Asedio, en una zona de combate, sitúa el Punto de Reunión dentro del Edificio, y no las saques hasta el momento adecuado. Una vez que están fuera, los Arietes y los Trebuchets son muy frágiles.